De Cano recibió amenazas por intentar averiguar donde estaba Genga

La primer audiencia de la semana comenzó con la declaración de Miguel Angel Acosta, retirado del servicio penitenciario federal y trabajador de la construcción. Su testimonio fue escaso en precisiones acerca de la detención de Rubén Ríos.

Acosta declaró que se enteró que se llevaron al marido de la prima de su señora. Supo que lo sacaron de la casa, lo metieron al baúl de un auto y que se lo llevaron. Luego se enteró que se escapo en el puente de Cipolletti-Neuquén.


“Escuché que era como una pelea de vecinos, pero no vimos nada, se escuchaba gente que corría. Después nos enteramos que se habían llevado a Rubén Ríos”.

Rubén Ríos era sindicalista de la empresa Agua y Energía. El 17 de Agosto de 1976  fue secuestrado en su casa de General Roca. Estuvo preso en el centro de detención “La Escuelita” en Neuquén.
La segunda en brindar declaración fue María Cristina Decano, quien aportó datos a cerca del secuestro de Luis Genga.

Maria Cristina De Cano. Fotografia Estefania Mottl

En el año 1976, Cristina ejercía como docente en la escuela 248 de Cipolleti, en ese año Luis Genga era director de la escuela Nº 50 en la misma ciudad y secretario general de la UNTER.

En su testimonio, la docente describió el día en que piensa, secuestraron a Genga. Relató que un día de invierno de 1976 fue a la casa de las hermanas Bottinelli y no había nadie allí, pero la situación era extraña, “vi el auto de Luis en lo de las hermanas Bottinelli y por eso paré, el estaba por rendir la ultima materia para recibirse de Licenciado en Letras, quería desearle suerte”. Cuando Cristina golpeó la puerta no atendió nadie, se asomó por las ventanas y vio todo muy raro, “No habia nadie, era raro por que estaban los platos en la mesa y los abrigos en las sillas, y era invierno como para que salgan sin ellos”.

Como le resultaba extraña la situación, fue a informarle de ello a Elena Meraviglia, ex esposa de Luis Genga, juntas decidieron ir a la comisaría y buscar información, “decidimos que la única que iba a entrar a la comisaría era Meraviglia, por que era la única que tenía vínculo legal con Genga”, Cristina describió la situación como riesgosa, debido al accionar policial y militar que se venía desplegando. Relató que con anterioridad habían allanado la escuela Nº 50, luego detuvieron a su compañera Gladys Sepúlveda y al tiempo allanaron la casa de Silvia Barco, que vivía en el mismo barrio.

Cristina declaró que el 7 de diciembre de 1976 se tuvo q exiliar con su familia por que recibieron amenazas, “nos decían que sabían donde jugaban nuestros hijos y que si no nos dejábamos de joder, iban a aparecer estrellados como mariposas”.

Cristina menciono que Quiñones le desestimó totalmente la denuncia y le que dijo que iban a ser liberadas las hermanas Bottinelli en una Zona que era desde Arroyito a Centenario. Al tiempo se enteró que Cristina Bottineli y Luis Genga aparecieron en muy malas condiciones.


Por Estefania Mottl